El anfitrión vuelve a participar un año más en su Trofeo, algo que lleva haciendo desde 1977, primera edición en la que los cadistas formaron parte del cuarteto de equipos del cartel, como premio a su primer ascenso a la Primera División.
La revalorización del Trofeo, con la contratación de importantes clubes para el mismo, vuelve a hacer que el Cádiz, sobre el papel, tenga menos posibilidades que el resto de sus rivales. Mientras Betis, Villarreal y Real Madrid parten con los objetivos de estar el año que viene en Europa, y en el caso de los blancos, de ganar además La Liga, los amarillos pelearan este año por regresar a la élite de nuestro fútbol.
Pero esta teórica inferioridad (y ya lo hemos visto otros veranos) se compensará seguro de sobra gracias a un elemento con el que resto de equipos no puede contar: la fantástica afición del Carranza, que como siempre, animará a los suyos de forma incondicional. No puede haber mayor motivación para los de Oli que intentar devolver ese cariño a la grada, y seguro que durante un fin de semana al menos, los amarillos tendrán alas para jugar de tú a tú a los importantes conjuntos que nos visitan en este Trofeo. |